miércoles, 23 de noviembre de 2011

SIGMUND FREUD

BIOGRAFÍA

El detective de la conducta humana, médico austriaco. Fue creador del psicoanálisis

Hizo sus estudios médicos en Viena, su ciudad natal. Luego se orientó hacia la neurología, que practicó hasta 1885. Obtuvo una beca en París, donde Charcot lo inició en el empleo del método hipnótico. En 1891, después de haber abierto un consultorio en Viena, trabajó con Breuer, quien le dio a conoc el método catártico o curación por la palabra, que aplicó al análisis de las imágenes del sueño en 1895. En su libro Estudi sobre la histeria, sentó su teoría sobre el inconsciente. Practicó sobre sí mismo un largo análisis en el curso del cual descubrió complejo de Edipo (1897-1902). Se unieron a Freud: Federns, Stecker, Adler, lones, jung, quienes extendieron el psicoanálisis por todo el mundo. Continuó sus investigaciones ampliando el campo del psicoanálisis al arte y la historia de las civilizaciones. Sus principales obras son: la interpretación de los sueños (1899), Psicopatología de la vida cotidiana (1904), Tres ensayos sobre la teoría de la sexualidad (1905), Tótem y tabú (1912), Metapsicología (1905), Mas allá del principio del placer (1919), Mi vida y el psicoanálisis (1921) Introducción al psicoanálisis (1926), El malestar en la civilización (1929).

Revolución Hermenéutica de Sigmund Freud

 La investigación de Freud redefine, para el siglo XX, lo que se entendía por psiquismo humano.El contexto histórico que acompaña los descubrimientos está dado por el denominador común que consiste en renunciar a todo recurso metafísico para explicar el origen del sentido. Sin embargo, el aporte de Freud consiste específicamente en pensar: ¿Qué pasa con la realidad desde que se cuenta con una teoría del inconciente?

En el presente texto se relevan las nociones de interpretación psicoanalítica y sus implicancias, al mismo tiempo que se advierte sobre los riesgos a los que se expone el psicoanálisis cuando intenta validar sus afirmaciones mediante los criterios del hermeneuta clásico.En la mitología griega, Hermes era el dios mensajero que llevaba los mensajes de los mortales a los divinos, y viceversa. Se trataba de una figura mitológica que cruzaba las fronteras; su facultad era la de poseer dos códigos y cumplir por tanto un rol de intercambio de mensajes y  traducción. De éste procede la palabra “hermenéutica”, que denomina el arte de interpretar los significados ocultos.

El concepto hermenéutico clásico (filológico) tiene que ver con la idea de sentido. La interpretación es concebida de la mano con el “comprender” y se pone en marcha cuando un signo nos rehúsa su sentido, poniéndose de manifiesto en las interrogativas: ¿Qué significa esto?, ¿Qué quiere decir? La hermenéutica no se dirige, por tanto, a la comprensión psicológica de una expresión.Por su parte,cabe mencionar la filología;esta era una antigua disciplina de lectura referida a textos que llegaban al presente con un carácter enigmático y frente al cual era preciso estudiar y “des-cubrir” su sentido; es decir, sacar el velo que nos esconde el sentido real de algo. Desde esta perspectiva, las cosas tienen un sentido inherente. Así, en la interpretación filológica lo importante es hallar qué quiso decir el autor.

En este contexto, existe una distancia entre el estudioso que lee el texto y el momento en que éste es producido. La hermenéutica clásica exige una distancia que deja inalterado el mensaje mientras que, por ejemplo, para quien sueña y pretende conocer el sentido de tal sueño, no existe distancia alguna; está todo él tomado por lo enigmático, por aquello que del pasado que se le hace presente. Hay algo pujante que le exige ser explicado y que proviene de sí mismo.

En relación a lo anterior, una de las nociones más importantes que introduce Freud es aquella por la cual podemos pensar que el sentido de un texto es dado, no en el momento en que es escrito (como supone la hermenéutica filológica), sino sólo una vez que es leído por alguien que se pregunta sobre el significado de tal material. También los teóricos de la sospecha se preguntan cómo acontece el sentido sin recurrir a lo sobrenatural, es decir, al sentido dado de antemano, inherente. “Nietzsche, Freud y Marx no han multiplicado los signos en el mundo occidental. No han dado un sentido nuevo a las cosas que no lo tenían. Ellos han cambiado la naturaleza y modificado  la manera como el signo en general podía ser interpretado”(Foucault, p. 40)

Las metáforas  con que Freud nos aproxima a sus investigaciones son las de la Arqueología, la Paleontología y la Filología. Freud es preso de su época, tradición y formación. La premisa que lo atrapa es que hay algo dado a la vista y algo que exige ser desenterrado; hay una superficie bajo la cual se esconde la profundidad de lo latente. “La profundidad es restituida ahora como secreto absolutamente superficial…asistimos a la inversión de la profundidad, al descubrimiento de que la profundidad no era sino un ademán y un pliegue de la superficie” (Foucault, p. 41).Como seres humanos, tenemos el sentido. Estamos condenados a una relación comprensiva con el mundo. Cuando nos enfrentamos a alguien, lo primero que queremos (ojalá) es hacernos comprender por ese otro, al mismo tiempo que intentamos comprender el sentido de sus palabras. 

El momento anti-hermenéutico del Psicoanálisis
 

·         El psicoanálisis se presenta inicialmente como una forma distinta de interpretación.  “El trabajo de interpretación del analista se distingue de la del filólogo no sólo por la articulación de un particular ámbito objetual; exige una hermenéutica específicamente ampliada, que frente a la interpretación habitual de las ciencias del espíritu tenga en cuenta una nueva dimensión” (Habermas, 1990, p. 216) ¿Qué dimensión es esa?
·         Habermas plantea que para Freud, a diferencia de Dilthey, “la biografía es objeto de análisis sólo en cuanto que es al mismo tiempo algo conocido y desconocido desde el interior, de suerte que es preciso ir más allá del recuero manifiesto” (Habermas, 1990, p. 216) Dilthey vincula la hermenéutica con lo subjetivamente mentado, cuyo sentido puede ser garantizado mediante un recuerdo inmediato.
·         En otras palabras, tanto Freud como Dilthey se encuentran con la infidelidad y la falta de claridad del recuerdo subjetivo y se ven en la necesidad de una crítica que reestablezca el texto deformado. Pero “la crítica filológica se distingue de la psicoanalítica por el hecho de que a través de la apropiación del espíritu objetivo vuelve al contexto intencional de lo subjetivamente mentado como última experiencia” (Habermas, 1990, p. 217)
La regla analítica fundamental y sus implicancias
·         El psicoanálisis comienza cuando Freud logra despojarse del método sugestivo. De ahí en adelante, estamos en el terreno de un acto de habla, con todo lo que eso implica. Desde aquel divorcio, la cura pasará siempre por ahí.
·         El lenguaje es una convención social frente a la que nos vemos inevitablemente entrampados y que, por tanto, nos condena al sentido. La escena comunicativa usual está dada por un conjunto de reglas comunicacionales que sirven a la función de intercambio de información, entendimiento y comunicación social entre sujetos.
·         La palabra psicoanálisis, es una palabra compuesta que contiene al análisis; palabra que a su vez designa el acto de descomponer, aludiendo a una operación de separación de elementos que construyen una totalidad.
·         La escena analítica es comunicativa que se forja justamente en base a una total oposición a aquella escena que nos hace sujetos sociales. Si en la escena cultural cotidiana la consigna es: “diga algo con sentido, presentable y que pueda sustentarse”, en la escena analítica el imperativo sería algo así como “diga la primera cabeza de pescado que se le venga a la cabeza” ¿Qué fundamentos tiene esta descabellada manera de comunicarse?
Sobre la noción de trabajo y producción
·         Freud interpreta los primeros sueños con una enorme convicción de que está descubriendo algo fundamental. ¿Qué es  lo fundamental del descubrimiento freudiano?
·         En “La Interpretación de los Sueños” Freud distingue entre contenido manifiesto y contenido latente. El primero es el material verbal con que cuenta al escuchar los sueños de sus pacientes; es el sueño recordado en tanto relato, ni más ni menos que  material verbal. El contenido latente, en cambio, es definido como el resultado del trabajo de interpretación.
·         La operación básica que permite el pasaje de lo manifiesto a lo latente es la asociación libre. Sólo a través de ésta sabremos cómo llegó a gestarse un sueño, cuáles fueron las conexiones de sentido, las cadenas significantes, los enlaces y nudos operativos.
·         Cuando introduce la noción de “trabajo” (del sueño, de la interpretación) asistimos a una especie de revolución epistemológica en que se derriban las oposiciones del discurso hegemónico. Así, la oposición “manifiesto/latente” es relevada por la de “trabajo del sueño/ trabajo de interpretación”, dando paso a un retorno de la forma. Desglosemos un poco esta condensada problemática.
·         Para Freud, el sueño no piensa, no juzga, sólo se limita a transformar. (Freud, 1990

Referencias bibliográficas
  •   Foucault, M. (1970) Marx, Nietzsche y Freud. Ed. Anagrama.
  • Freud, S. (1990) “La Interpretación de los Sueños” Obras Completas, Amorrortu ed.
  • Habermas, J. (1990) Conocimiento e interés. Taurus Ed. B.Aires
  • Biografia de Sigmund Freud .Resumen obtenido el dia 22 de Noviembre de 2.011 de:http://www.cuentosdedoncoco.com/2010/11/biografia-de-sigmund-freud-resumen.html

 

sábado, 12 de noviembre de 2011

CLIFFORD GEERTZ (1926 - 2006)

LA HERMENÉUTICA Y LA ANTROPOLOGÍA SIMBÓLICA DE CLIFFORD J. GEERTZ

Realizado por: Carlos Andrés Pardo G.




"La cultura de un pueblo es un conjunto de textos o de formas simbólicas"
                                                                                                 Clifford Geertz

BIOGRAFÍA:

Clifford James Geertz nació en San Francisco (California, Estados Unidos) el  23 de agosto de 1926,  fue un antropólogo estadounidense que ocupaba el puesto de profesor emérito en el Institute for Advanced Study, de la Universidad de Princeton, Nueva Jersey. Su proceso de formación académica fue interrumpido entre 1943 y 1945 para servir en la Marina Norteamericana durante la Segunda Guerra Mundial. Comenzó su actividad académica en el MIT (1952-58) y, como becario, en el Center for Avanced Study in the Behavioral Sciences de Stanford (1958-1960), de donde pasó, en calidad de profesor asociado, a la Universidad de Chicago (1960-1970). 

En 1970 se trasladó a la Universidad de Princeton, de cuyo Institute for Avanced Study fue nombrado profesor emérito en los años 90 del pasado siglo. Realizó estudios de antropología en el Antioch College de Ohio donde realizo su licenciatura en filosofía y seis años después en la Universidad de Harvard, alcanzó su doctorado en antropología. Su primer proyecto lo realizó en el Sureste de Estados Unidos, en Rimrock, a partir del cual comenzó a publicar sus primeros artículos. Poco después realizó su primer viaje a Indonesia, junto con su esposa; él estudiando los patrones religiosos y ella las relaciones de parentesco y familia.

Tras el viaje a Indonesia, publicó su primer libro Agricultural Involution, un estudio histórico sobre las formas de agricultura en los cultivos de arroz, y la manera en que los modos tradicionales de producción agrícola perduran e incluso se intensifican ante el paso del tiempo.  A partir de aquí, Clifford Geertz ha publicado cerca de una docena de libros, algunos de ellos considerados como verdaderos "clásicos" de la disciplina antropológica.

Clifford Geertz se le ha considerado como el creador de la llamada "Antropología simbólica", que en contraste con la antropología cultural convencional, identifica un modo de concebir el trabajo antropológico en la definición de interpretación de aquellos agentes a los que estudia, es decir, la antropología simbólica se centra en las diferentes maneras en las que la gente entiende su alrededor, así como las acciones de los demás miembros de su sociedad. Formando parte así del equipo de antropólogos de la Universidad de Chicago (1960-70); en donde posteriormente se convirtió en profesor de ciencias sociales del Institute for Advanced Study en Princeton de 1970 al 2000, donde fue emérito hasta su muerte, el 30 de octubre de 2006.

LA HERMENÉUTICA CULTURAL Y LA ANTROPOLOGÍA INTERPRETATIVA DE CLIFFORD GEERTZ


Según lo propuesto por  Clifford Geertz en las diversas tesis realizadas frente al proceso de interpretación antropológica, refiere que la cultura debe ser visualizada como un conjunto de signos. De igual forma Geertz reconoce que este modo de interpretación tiene antecedentes epistemológicos, propuesto por autores tales como Freud, Durkheim, Cassier y G.H. Mead, quienes establecen que  la acción social (conjunto de signos),  es algo que configura y comunica un significado propio. Siendo de este modo para Geertz la reflexión hermenéutica, un medio para otorgar un sentido particular a cosas particulares.

Así mismo, es pertinente afirmar que Geertz no estableció de forma concreta, única o explicita una teoría hermenéutica de la cultura; sin embargo parte sus trabajos fueron direccionadas a esta temática, identificando así tres tesis principales que se verán a continuación:

Tesis
Concepción
“Toda interpretación que hace el analista es discutible”
“Un enfoque interpretativo significa abrazar una concepción de las enunciaclones etnográficas. Para decirlo con una frase famosa de W B Gallie, “esencialmente discutible”. La antropología, o por lo menos la antropología interpretativa, es una ciencia cuyo progreso se caracteriza menos por un perfeccionamiento del consenso que por el rehamiento del debate” (Geertz, 1987 citado en Arriarán, 2000).
“El pensamiento construye (y no refleja) las realidades sociales”


“La cultura se comprende mejor no como complejos de esquemas concretos de conducta (costumbres, usanzas, tradiciones, conjunto de hábitos), como ha ocurrido en general hasta ahora, sino como una serie de mecanismos de control o ‘programas’ que gobiernan la conducta” (Geertz, 1987 citado en Arriarán, 2000).

La auto-comprensión y la comprensión del otro se hallan internamente relacionadas en todos los ámbitos de la cultura (el derecho, el arte, la política, etc.)”
Lo que necesitamos es buscar relaciones sistemáticas entre diversos fenómenos, no identidades sustantivas entre fenómenos similares (…), es decir, una concepción en la cual factores biológicos, psicológicos, sociológicos y culturales puedan tratarse como variables dentro de sistemas unitarios de análisis(Geertz, 1987 citado en Arriarán, 2000).


Partiendo de estos tres elementos teóricos, Geertz establece dos ejemplos característicos a partir de su experiencia, en donde interpreta la intencionalidad que pretenden ciertos fenómenos sociales, donde su significado es contrario a lo que expone realmente, siendo estos:

  • El ejemplo de la pelea de gallos:



Surge en contra posición a lo expuesto por el enfoque positivista, donde Geertz plantea la necesidad de la hermenéutica en la búsqueda de la comprensión del otro en sus propios marcos de percepción social, y no a partir de las percepciones prejuiciosas de agentes externos. Según este autor este tipo de ritual maneja una serie de sistemas indispensables de representaciones, en donde se identifican dos perspectivas principales:

Según lo anterior, la intencionalidad de la pelea de gallos es "simplemente un ritual simbólico sobre la guerra entre el yo y lo circundante. su fuerza simbólica reside en su capacidad de unir esas dos realidades" (Arriarán, 2000).

  • El ejemplo del arte como sistema cultural:



Geertz le otorga un papel muy relevante a las experiencias artísticas o estéticas y, en este sentido compara los rituales de culturas alejadas con las obras de arte occidentales. El significado común consiste en que una cultura busca expresar, interpretar ciertas experiencias vitales y hacerlas comprensibles, y un medio por el cual se logra hacer manifiesto, a través, de expresiones de arte.

















CRÍTICAS

Autores
Críticas
Escuela de Investigación Americana de Santa Fe (1984)

·      "El señalamiento de que el objetivo de la hermenéutica debería ser el estudio de los textos sobre la cultura más que la cultura como texto".
·        "Lo que debía hacer es era desconstruir la representación del autor sobre los otros". Este señalamiento esta claramente apoyado en las tesis de Derrida sobre el proceso de escritura logocéntrica y en Foucault sobre los modos clásicos de representación.
·          "Se cuestiona a Geertz porque no es posible encontrar una verdad objetiva, porque toda verdad es una fábula construida por el autor del texto".

Rabinow (1991)

·     "Recurre a la ficción para transmitirnos su información más que en el tratamiento del objeto de interpretación".
·      “Dice que estuvo allí (en Ball), pero en el texto se esfuma del lugar de los hechos”.




POSTURAS TEÓRICAS DE GEERTZ
  • El hecho de sustituir el estudio de la cultura como texto por el estudio de los textos por el estudio de los textos sobre la cultura, lleva a producir textos antropológicos altamente saturados de subjetivismo.
  • No niega la acusación en sentido de que la interpretación simbólica no garantiza de por sí el acceso a una verdad objetiva, sino que admite que, en ocasiones, toda verdad depende de la manera en que un autor nos convence de su experiencia con la otra cultura.
 
REFERENCIAS
  •  Arriarán, S. (2000). La hermenéutica de Clifford Geertz. México: Iztapalapa
  • Condori, R. (2011). Biografía de Geertz. Scribd. com. Recuperado noviembre 12, 2011 de http: //es.scribd.com/doc/50726458/Biografia-Geertz/
  • http://es.wikipedia.org/wiki/Clifford_Geertz
  • http://monosincabeza.wordpress.com/2009/11/09/clifford-geertz-1926-2006/
  • http://www.liceus.com/cgi-bin/aco/ant/geertz.asp
PAUL RICOEUR
"La diferencia entre los jóvenes y los viejos es que los viejos tienen muchos más recuerdos y mucha menos memoria."
 Realizado por: Adri Palma
 
VIDA

Ricoeur nace en (Valence (Charente), el 27 de febrero de 1913 -  y muere en Châtenay-Malabry, el 20 de mayo de 2005) fue un filósofo y antropólogo francés conocido por su intento de combinar la descripción fenomenológica con la interpretación hermenéutica.
Los primeros años de Ricœur estuvieron marcados por dos hechos principales. El primero fue que nació en una devota familia protestante, convirtiéndose así en miembro de una minoría religiosa en la católica Francia. El segundo, que su padre murió en 1915 en la Primera Guerra Mundial, cuando Ricœur tenía solamente dos años de edad. Como consecuencia, fue educado por su tía en Rennes con una pequeña pensión asignada por su condición de huérfano de guerra. Ricœur era un muchacho intelectualmente precoz y amante de los libros, cuya inclinación hacia el estudio fue incentivada por el énfasis de su familia protestante sobre el estudio de la Biblia. En 1933 Ricœur se licenció por la Universidad de Rennes y en 1934 comenzó sus estudios de filosofía en la Sorbona, donde fue influido por Gabriel Marcel. En 1935 se licenció en filosofía.

AÑO
ACONTECIMIENTO
1939
Fue movilizado para servir en el ejército francés. Su unidad fue capturada durante la invasión alemana de Francia en 1940, y pasó los cinco años siguientes como prisionero de guerra.

(1948-1956)
Tras la guerra Ricœur obtuvo una plaza en la Universidad de Estrasburgo donde publicó prolíficamente.

1950
Recibió el doctorado presentando dos tesis (como es costumbre en Francia): una tesis 'menor' que era una traducción y comentarios de las Ideas I de Husserl (por primera vez en francés), y una tesis 'mayor' que posteriormente se publicaría como Le Volontaire et l'Involontaire.

1956
Ricœur consiguió la cátedra de Filosofía General en la Sorbona. Este puesto marcó el ascenso de Ricœur como uno de los más prominentes filósofos de Francia. Durante esa época escribió Freud y Filosofía y El simbolismo del mal, que cimentaron su reputación.

De 1965 a 1970
Ricœur ocupó un puesto en la recientemente fundada Universidad de Nanterre. Nanterre era un experimento en educación progresista y Ricœur esperaba que esto le daría una oportunidad de escapar de la atmósfera sofocante de la limitante tradición de la Sorbona y crear una universidad acorde con su visión. Desgraciadamente, Nanterre se convirtió en un vivero de protestas durante la revuelta estudiantil de Mayo del 68 y Ricœur fue ridiculizado como un 'viejo payaso' y títere del gobierno francés.

1970
Fue precursor de la corriente interpretativa de principios de la década de 1970. La hermenéutica, como la llamará después, será la gran tendencia de Ricouer, póstumo a su llegada a Francia. Será, luego, una gran influencia para autores como C. Geertz y J. Thomson. Junto a otros autores como Gadamer promovieron una tensión en la filosofía que hasta hoy en día es tema en discusiones de temas académicos.
1970
Se trasladó a la Universidad de Chicago donde permaneció hasta 1985. Gracias a este cambio Ricœur se familiarizó con la filosofía estadounidense y las ciencias sociales, convirtiéndose en uno de los pocos pensadores igualmente cómodos con el mundo intelectual de habla francesa, alemana e inglesa.
1999
 Recibió el Premio Balzan de Filosofía,
2003
Recibió  el Premio Pablo VI y el año siguiente,
29 de noviembre de 2004
Fue galardonado con el segundo premio John W. Kluge por toda una vida de logros en Humanidades (compartido con Jaroslav Pelikan).

OBRAS
1.   EL CUESTIONAMIENTO DE LA TRADICIÓN REFLEXIVA: EL SUJETO PUESTO EN CUESTIÓNReferencias :
Con todos ellos Ricoeur ha entrado en diálogo, en un intento por asumir con honestidad intelectual admirable hasta las posturas más alejadas. No siempre ha sido tratado con la misma cordialidad que él dispensa. No pocas veces su condición de creyente ha sido causa de durísimas intolerancias en su contra. Pero dejemos que sean sus propias palabras las que nos digan cómo ha atravesado estas modas culturales, estos momentos filosófico-culturales, estos pensamientos que parecían tan hegemónicos y que cada uno en su momento prometía un reinado eterno.  Frente a este panorama complejo, dirigiremos la mirada al modo como Ricoeur enfrenta dos posiciones de pensamiento con las que se ve confrontado después de publicar La simbólica del mal en 1960. Se abre un periodo que califica de "polémicas exteriores y de guerras intestinas" (10) que durará hasta que a fines de los años setenta se produzca el cambio de los paradigmas filosóficos franceses.
1) La cuestión del psicoanálisis
2) La cuestión del estructuralismo
          En el trabajo que Ricoeur dedicó a Freud, De la interpretación. Ensayo sobre Freud (1965) se empeña en reconocer la validez del psicoanálisis, asignándole la mayor potencia argumentativa antes de entablar con él una clara relación crítica. Así, primero en su 'lectura', presenta "la explicación freudiana como discurso mixto, que mezcla el lenguaje de la fuerza (pulsión, carga, condensación, desplazamiento, represión, retorno de lo reprimido, etc.) y el del sentido (pensamiento, deseo, inteligibilidad, absurdo, disfraz, interpretación, interpolación, etc.)" (13). Discurso mixto debido a la naturaleza mixta de su objeto, situado en el punto de flexión del deseo y el lenguaje. Luego en la sección 'interpretativa' de la obra sobre Freud, confronta el discurso del psicoanálisis así reconstruido con el de la fenomenología y el de la filosofía reflexiva, y presenta "la oposición entre los dos discursos como la existente entre un movimiento regresivo, orientado hacia lo infantil, lo arcaico, y un movimiento progresivo, orientado hacia un telos de completud significante".

          Quedaba por encarar el segundo frente de este conflicto de las interpretaciones: el estructuralismo. Un título globalizador para la vasta corriente lingüística surgida de Ferdinand de Saussure. "La semiología profesada por Roland Barthes, la semiótica de A.J. Greimas, la crítica literaria ilustrada por Gérard Genette, tenían en común el hecho de ajustarse únicamente a las estructuras de los textos, con exclusión de la intensión supuesta de su autor" (16). A ellos se agregaba la prestigiosa y magistral obra de Claude Lévi Strauss sobre los mitos (17), y los giros estructuralistas que tomaban tanto el marxismo con Louis Althusser, como el psicoanálisis con Lacan. "Ahora bien, no era en cuanto hermenéutica de la sospecha que el estructuralismo cuestionaba la noción de sujeto, sino en cuanto abstracción objetivante, por la cual el lenguaje se encontraría reducido al funcionamiento de un sistema de signos sin anclaje subjetivo" (18). Apoyándose en Emile Benveniste que hacía de la oración y no del signo léxico la primera unidad de sentido del lenguaje, en Roman Jakobson para definir el discurso ("alguien dice algo a alguien sobre algo según reglas") y en la distinción de G. Frege entre sentido (decir algo) y referencia (sobre algo), Ricoeur trabaja sobre la polaridad entre semántica y semiótica. "De esta polaridad de base veía derivar a las demás polaridades constitutivas de un conflicto de interpretaciones que afectan todo el imperio de las significaciones.


2. EL CUESTIONAMIENTO DE LA TRADICIÓN HERMENÉUTICA: CRÍTICA Y DECONSTRUCCIÓN
1) Hermenéutica y teoría crítica
Ricoeur entre Habermas y Gadamer. Una buena introducción en el aporte ricoeuriano al famoso debate de la década del setenta entre Gadamer y Habermas, nos lo ofrece un párrafo que le dedica en Temps et récit.
"No pretendo atenuar el conflicto entre hermenéutica de las tradiciones y crítica de las ideologías; su 'ambición de universalidad' ­para retomar el tema de una controversia entre Gadamer y Habermas, consignado en el volumen Hermeneutik und Ideologiekritik, Francfort, Suhrkamp, 1971­ procede de dos 'lugares diferentes': la reinterpretación de los textos recibidos de la tradición, en uno, y la crítica de las formas sistemáticamente alteradas de la comunicación, en el otro. Por eso, no se puede simplemente superponer lo que Gadamer llama pre-juicio, que es un prejuicio favorable, y lo que Habermas llama ideología, que es una distorsión sistemática de la competencia comunicativa. Se puede solamente mostrar que, hablando de dos lugares diferentes, cada uno debe integrar un segmento del argumento del otro. Es lo que intento demostrar en "Herméneutique et critique des idéologies".
Para Ricoeur lo que está en juego en este debate es el gesto filosófico de base: entre el gesto hermenéutico del humilde reconocimiento de las condiciones históricas a las que estamos sometidos y el gesto crítico, gesto fiero de desafío dirigido contra las distorsiones de la comunicación humana.
2) Hermenéutica y deconstrucción
Ricoeur estima que la idea de desconstrucción es sobre todo fecunda frente al lenguaje de la escuela ­de cualquier escolástica­ cuando la fecundidad de un sistema ha sido congelada. Por su parte prefiere reactivar temas inexplorados o que han permanecido secundarios, como por ejemplo aquel de la polisemia del ser del propio Aristóteles: "el substancialismo no ha agotado la ontología, ya que tenemos al menos la posibilidad de pensar el ser en términos de acto, de acción, de actuar, de padecer"
3.   El DESPLAZAMIENTO HERMENÉUTICO DE LA FENOMENOLOGÍA: LA HEREJÍA RICOEURIANA
El descubrimiento del problema hermenéutico es quizás el mayor desplazamiento sufrido por este discípulo de Husserl. La fenomenología hermenéutica de Ricoeur ya no es una versión más de un hereje menor sino una matriz capaz de acoger una reflexión filosófica fecunda y novedosa.
1) El giro hacia el lenguaje como la irrupción de lo otro de la fenomenología
Ricoeur se da cuenta relativamente pronto que es sobre el dominio del lenguaje que se agrupan todas las búsquedas filosóficas. Por lo tanto, Ricoeur en su obra sostiene un diálogo fecundo con las filosofías inspiradas en lo que se ha venido en llamar linguistic turn. Intentar articular adecuadamente la relación entre realidad y lenguaje, es un desafío y rasgo que atraviesa toda su obra:
"No es que todo sea lenguaje, como se dice a veces con exceso en concepciones en que el lenguaje ha perdido su referencia al mundo de la vida, al de la acción y al del intercambio entre las personas. Pero si bien no todo es lenguaje, nada en la experiencia accede al sentido, sino con la condición de ser llevado al lenguaje. La expresión: 'llevar la experiencia al lenguaje' invita a considerar al hombre hablante, si no como equivalente del hombre en sentido estricto, sí al menos como la condición primera de ser hombre. Incluso si, en un instante, nos encamináramos a hacer de la categoría del obrar la categoría más notable de la condición personal, el obrar propiamente humano se distingue del comportamiento animal, y con más motivo del movimiento físico, en que este debe ser dicho, es decir, llevado al lenguaje, con el fin de ser significativo"
2) El injerto de la hermenéutica en el método fenomenológico
Ricoeur vuelve a la temática del sujeto, advertido por todas sus indagaciones hermenéuticas de evitar las tentaciones idealistas y subjetivistas que han acosado a la filosofía reflexiva moderna. Al retomar la cuestión del sujeto, bajo la forma de una "hermenéutica del sí mismo", debe abrirse paso entre el "sujeto ensalzado" de Descartes, y el "sujeto humillado" de Hume y Nietzsche (81); ni el Cogito que se funda a sí mismo, ni el anti-Cogito. Abandonar la ambición fundacional atribuida al Cogito no lo induce a sumarse a sus sepultureros que lo declaran definitivamente quebrado (brisé). Más bien emprende un camino antropológico más provechoso, una suerte de tercera vía, que con el nombre de hermenéutica del sí intenta dar sentido a la idea y a la expresión de un Cogito herido (blessé) esbozado en sus obras anteriores. Su hermenéutica del sí mismo es una indagación, que somete a todas las mediaciones del lenguaje, de la acción, de la narración y de la ética, a un que será sucesivamente llamado "locutor, agente, persona de narración, sujeto de imputación moral, etc." (82). Es la testificación de a todos los niveles: lingüístico, práxico, narrativo, y prescriptivo.
 4. ACTUALIZACIÓN DEL TEXTO EN EL ACTO DE LECTURA
El punto de partida de Ricoeur es el intento por superar la antinomia entre distanciación alienante y pertenencia a la que Gadamer ha conducido la reflexión: "¿Cómo es posible introducir una instancia crítica cualquiera en una conciencia de pertenencia expresamente definida por el rechazo de la distanciación?" (90). La problemática del texto aparece como el medio de escapar a la alternativa y reintroducir una noción positiva, productiva de la distanciación: el texto "es el paradigma de la distanciación en la comunicación" (91). El texto "revela un carácter fundamental de la historicidad misma de la experiencia humana, a saber, que ella es una comunicación en y por la distancia" (92).
1) Dialéctica entre comprensión hermenéutica y explicación metódica
Ricoeur se ocupa de la tensión entre la búsqueda histórica y la actualización hermenéutica. El problema de fondo está en que los desarrollos de la hermenéutica filosófica tienen algo que decir respecto de un privilegio unilateral del método histórico-crítico. Una hermenéutica ya no preocupada de las intenciones del autor, ni de lo que está detrás del texto, sino de lo que está en él y de lo que este abre, tiene mucho que aportar al arduo trabajo de interpretación exegética al que son sometidos los textos clásicos, literarios, filosóficos, bíblicos, jurídicos. Ricoeur sostiene que el análisis estructural puede ser conectado con una interpretación existencial, a condición de que sea desconectado de la ideología estructuralista (93). Así se transforma en un método que no niega la hermenéutica al establecer una vía alternativa, sino que la enriquece al ser una etapa intermedia y necesaria
2) La dialéctica acontecimiento y sentido
Si la noción de texto posee un carácter paradigmático, y aparece como el aporte de Ricoeur al problema hermenéutico, debemos partir por atender a la dialéctica del acontecimiento y de la significación, que nos es presentada como el primer rasgo de distanciación, condición de posibilidad de todo lo ulterior, lugar de nacimiento del problema hermenéutico.
El paso del discurso oral a la escritura hace más explícito los rasgos que señalábamos más arriba, por la triple autonomía que el texto escrito subraya. Autonomía respecto de la intención del autor que, al no estar ya más presente, abandona el texto a su propia significación. Autonomía respecto de la situación dialogal que reemplaza al destinatario original por cualquiera que lea el texto. Autonomía respecto de la situación común de los interlocutores que cede su lugar al mundo al que el texto refiere. Triple autonomía que nos muestra que la distanciación no es una alienación que introduce la metodología, sino que es "constitutiva del fenómeno del texto como escritura"
3) La dialéctica entre el mundo del texto y el mundo del lector
Ricoeur sostiene que la noción mundo del texto es la categoría central en su concepción hermenéutica. Ricoeur nos lo dice claramente: "Es en la intersección del mundo del texto y del mundo del lector que algo sucede. La lectura se convierte en un acontecimiento, y es la capacidad de los relatos clásicos o modernos de abrir una brecha en nuestra experiencia cotidiana y así problematizarla o (...) poetizarla. Pero es necesaria esta colaboración, incluso esta amistad, entre un lector que tiene sus esperas y un texto que tiene una estructura. La dialéctica de la estructura interna y de la espera del lector contiene todo el problema de la esperanza poética.
5. LA HERMENÉUTICA COMO UN MÁS ALLA DEL OBJETIVISMO Y EL RELATIVISMO
Rasgo característico de la hermenéutica de Ricoeur ­lo hemos señalado con insistencia­ es procurar mediar polos que se presentan como excluyentes. Su interés por integrar la noción de distanciación en una tradición caracterizada por la pertenencia ("la comunicación en y a través de la distancia", nos ha dicho (146)) se manifiesta en los complementos que aporta a sus predecesores: frente a Gadamer evita prescindir de las cuestiones de método en la búsqueda de la verdad, frente a Heidegger hace un camino de vuelta desde la radicalidad ontológica hacia las consideraciones epistemológicas, frente a Dilthey intenta superar la dicotomía entre ciencias del espíritu y ciencias de la naturaleza.